En nuestra ciudad, el flujo vehicular suele ser muy elevado más que todo en las horas pico y si debemos recorrer la ciudad de un extremo a otro justo en esas horas donde el tráfico está imposible podríamos llegar a sufrir de estrés al volante.
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Aunque no está en nuestras manos evitar la congestión vehicular, sí podemos elegir la actitud con la que asumimos los retos que nos presenta el día a día.
Para evitar sufrir de estrés por el tráfico, ten en cuenta los siguientes consejos:
- Planear las rutas: Antes de iniciar tu recorrido, infórmate sobre el flujo vehicular que transita en ese momento por las rutas que piensas tomar, si notas que en alguna de las calles por las que planeabas desplazarte se evidencia un atasco opta por elegir una ruta alterna.
- Acomodarse bien: Mantener una buena postura al conducir evita dolores musculares y lesiones en la columna con el paso del tiempo, acomoda la silla lo más recta posible y alinea a esta el apoyacabezas, cruza el cinturón de seguridad sobre tu cuerpo y mantén la espalda recta sobre el espaldar de la silla, flexiona levemente los brazos y las piernas para no sufrir calambres.
- No tomes una actitud agresiva: Pitar en exceso, gritar y discutir con los demás conductores no hará que los vehículos avancen con mayor facilidad, por el contrario este tipo de conductas pueden generar desconcentración en los conductores y terminar originando accidentes de tránsito.
- Anticiparse: Mide el tiempo necesario para llegar a tu destino y sal de casa con un colchón de tiempo extra que consideres suficiente para no retrasarte por culpa del tráfico, los conductores que no se preocupan por empezar a conducir con anticipación son los que terminan sufriendo mayor estrés cuando el tráfico se torna complicado.