Prestar atención al conducir es un factor clave para mantener la seguridad, pues la desconcentración al volante puede provocar accidentes en tan solo un segundo. Aunque es claro para todos que estar concentrados en los distintos obstáculos que puedan presentarse en el camino ya sean otros vehículos, motos o peatones es importante para tener mayor capacidad de respuesta, muchas veces damos por sentado que la atención debe fijarse únicamente en lo que el camino nos muestra por la parte delantera del vehículo, sin embargo en la conducción frecuentemente se habla de que la atención debe ser dividida en tres tipos.
Lea también: ¡Lavar tu carro en casa es ahorrar dinero!
estos son: atención selectiva, atención dividida y atención sostenida.
- Atención selectiva: La atención selectiva contribuye a que nuestra capacidad para conducir sea más fluida y eficiente, debido a que aumenta la capacidad de nuestro cerebro de reacción con rapidez a eventos que lo requieran.
Esta atención es una de las consecuencias directas que se provocan por nuestra limitada capacidad para atender distintos estímulos en un mismo momento.
- Atención dividida: Durante la conducción se presentan situaciones en las que debemos prestar atención a más de un factor a la vez. Uno de los ejemplos más claros en los que necesitamos usar la atención dividida es cuando adelantamos un carro, pues necesitamos estar pendientes de: el carro que vamos a adelantar, los carros que circulan en sentido contrario, el vehículo que viene detrás de nosotros, la señalización de la vía y la velocidad que necesitamos alcanzar para poderlo rebasar.
Si no divides tu atención adecuadamente, tu capacidad de reacción frente a los distintos estímulos que se te presenten será muy reducida.
- Atención sostenida: Esta atención se refiere a la necesidad de permanecer alerta frente a posibles estímulos que puedan presentarse a lo largo del tiempo. Mantener atención sostenida durante la conducción es clave para evitar sufrir distracciones que pueden desembocar en accidentes de tránsito.
